Esta entrada se refiere al segundo taller, realizado hace un año, en la
Escuela Municipal Tito Salas, situada al lado del Embalse La Pereza, en Filas
de Mariches, fui invitado por la profesora Deisy para darle el taller a los jóvenes
de su aula, y al tiempo recuerdo con agrado ese taller por varias razones, rompí
mi récord de aulas en una mañana, cuatros en total, donde alumnos y docentes se
unían para tratar ganarme todas las partidas, y en uno de esos salones alumnos
y docentes se abrazaron ante mi derrota.
En otro sección puse en practica una idea que desde hace tiempo venia
gestando, el Go no tiene que ser Chino ni Asiático ni extranjero, nunca le
decimos al niño que el fútbol es Ingles, o ajedrez es Hindú etc.
El juego es de
ellos y mas nada y para reforzarlo les dibuje un tablero de 13 x 13 en la
puerta donde tendrán que verlo todos los días de clases, enraizando el tablero
en lo mas profundo de sus pensamientos. Para posteriores visitas esta idea la
ampliares pintando murales sobre el Go donde pueda ser visto por la mayor
cantidad de niños posibles.
Y por ultimo el aprendizaje fue para mi, en la tercera aula al cual fui
invitado esa mañana, tres alumnos dos varones y una niña estaban jugando Go
sobre una hoja cuadriculada, fue tanta mi sorpresa que descubrieran o
inventaran esta modalidad del Go que no indague los detalles de su juego, Cosas de minutos para ellos y para mi al año todavía
es una sorpresa y un grato recuerdo
En los talleres trato que el o
la docente se mantenga en el Aula como
apoyo y disciplina, pero luego lo involucro y trato que apoye a su grupo para
jugar contra mi, a los alumnos le doy 9
piedras de ventaja en un tablero de 9 x 9 y luego la reduzco a 4, todo con el
fin de que jueguen y se sientan bien.
Terminando de colocar las fotos de este texto me doy cuenta que lo importante no es lo que aprendo, sino lo que asocio o creo, un poco de Go mas algo de Doman pueden hacer mucho para la población especial.